FERIA DEL LIBRO DE PALMA DEL RÍO

Del tres al siete del presente mes de Mayo, se ha celebrado en el jardín Valparaiso la Feria del Libro de nuestra localidad.
Por primera vez se me ha invitado a participar en ella como editorial y hemos acudido gustosamente. ¿Que decir de la experiencia? pues como una feria que es, aunque parezca que sea de caracter menor por ser del libro, cada uno contará, como pasa con cualquier otra Feria, según le haya ido. En mi caso, no es que nos haya ido de maravilla, pero teniendo en cuenta todas las circunstancias y las expectativas hay que decir que no hemos salido demasiado mal parados.
Las expectativas no eran muchas ya que al tener Coleopar Ceparia un catálogo todavía pequeño de libros y estar estos bastante publicitados ya en nuestra localidad, sabía que no era posible tener un éxito rotundo de ventas.
Las circunstancias son las mas que mas nos han defraudado, no exclusivamente a Coleopar Ceparia, creo que puedo decir que nos han defraudado al 80 % de las empresas que teníamos stand en esta Feria del Libro.
Una Feria del Libro, la de Palma del Río, que tras varios años en los que solo ha habido un stand, por fin parecía remontar este año, al menos en participación librera, ya que ha contado con stand de dos librerías palmeñas (Papelería Milla y Librería Goya) y tres editoriales (Séneca, Páramo y Coleopar Ceparia), lástima que este esfuerzo por la parte que a los libreros toca, no haya llevado consigo un acierto organizativo (las circunstancias) para que se hubiera podido redondear con un éxito que animara al montaje de mas stand para la próxima edición.
CIRCUNSTANCIAS ADVERSAS:
* El sitio: a pesar de ser un lugar idílico, apartado del mundanal ruido, estaba tan apartado que raramente si alguien no entraba en los jardines se podía enterar de que se estaba celebrando una Feria del Libro en ellos.
* La comunicación: ha faltado implicación por parte de los centros docentes y parece ser que el problema es que la organización no se puede conformar con mandar una cartita a los directores y esperar a que estos tengan a bien comunicárselo a los profesores. Me consta que ha habido profesores y profesoras que no han acudido con sus cursos porque no han tenido la mas mínima información. Me han llegado a comentar incluso, que acudir a la Feria del Libro era una actividad que debía prepararse con talleres y actividades previas a su celebración.
* La incomunicación: ha sido tal la falta de comunicación, de previsión, o simplemente de indiferencia entre distintas áreas municipales, que han llegado a programar o mas bien a contraprogramar la presentación del libro del Cordobés muy lejos de donde se celebraba la Feria del Libro, el mismo día y a la misma hora en que en esta estaba prevista la presentación de otro libro, con el lamentable y siguiente resultado: la autora Clara Peñalver, desplazada desde Granada para esta presentación,tuvo, con gran enfado por su parte, que suspender el acto por falta de público. Imagínense el bochorno que tendría que pasar el compañero de la Editorial Páramo.
* Las fechas: para colmo, penúltimo y último día de la Feria del Libro, coincidieron con el inicio del período de comuniones, con lo que las tardes del fin de semana, lejos de ser los días mas fuertes de la Feria, se convirtieron en todo lo contrario, hasta el punto de que el sábado estuvo prácticamente desierta.
Todo esto, unido a otras "cosillas", ha hecho que el resultado para las personas que han montado stand por primera vez, no haya sido nada satisfactorio y este ha dejado un regusto bastante amargo. Difícilmente con tantos handicaps se podrá lograr una Feria del Libro digna para una ciudad como Palma del Río y si es que desde el Patronato de Cultura se quiere que esta vaya a mas, creo que para futuras ediciones se tendrían que tener muy en cuenta algunas de estas observaciones.
Creo que todos somos conscientes que con editoriales pequeñas como las que hemos acudido a esta Feria, no solo no vamos a hacernos ricos, sino que tendremos que seguir poníendole dinero y trabajo, si queremos seguir adelante. De hecho todos tenemos esta actividad como un hobby al que le dedicamos gran parte de nuestro poco tiempo libre y una buena parte del dinerillo que podemos escaquear a nuestros sueldos, como he dicho antes somos conscientes de que querer editar libros es una pasión o si quieren, una locura, de la que solo sacaremos muchos cabreos y alguna que otra gran satisfacción y que si hubiéramos querido sacar dinero habríamos montado un bar. Miren si será así que para una vez que tocaba satisfacción (Feria del Libro) esta se ha convertido también en otra frustración mas en nuestro haber.