FERIA DEL LIBRO 2013, BALANCE

Como estaba previsto el sábado día 11 terminó la Feria del Libro de Palma del Río 2013 y desde Coleopar Ceparia vamos a hacer balance de ella.
Ya de por sí, no fue buena señal que el último día de esta Feria, cuando todavía faltaba mas de media hora para su finalización, estuvieran todos los stands recogidos, cosa esta que habla por sí sola de lo que ha sido la afluencia de público en general.
De todos modos, esto es una Feria y como siempre se ha dicho popularmente, -cada uno cuenta la Feria según le va- así que lo que aquí vamos a exponer es cual es el balance de Coleopar Ceparia. A unos les habrá ido mejor que a nosotros y a otros puede que peor.
La palabra que mejor define nuestra opinión de la Feria es desilusionante, podíamos además darle otros adjetivos, pero creemos que este es el mas apropiado y el que mejor lo engloba todo.
Desilusiona la poca importancia que se le da al esfuerzo que para estar en esta Feria tenemos que hacer las librerías y editoriales participantes. Bien es cierto que estamos ahí porque queremos, que solo nos obliga nuestra apuesta contínua por un sector como es el del libro, abandonado y discriminado por todas nuestras administraciones, incluida la local.
Desilusiona que en un país en general y en una ciudad como la nuestra en particular, donde desde las distintas administraciones, incluida la local, se subvenciona todo (Carnavales, Deportes, Empresas privadas, Personas privadas, directa o indirectamente, Semana Santa y hasta bastantes mas que algunos Peroles o Viajes), exista una opinión tan generalizada entre los responsables municipales de que bajo ningún concepto se puede subvencionar la adquisición de algo tan fundamental para la cultura, como es un libro, ni a colegios, ni a particulares. Sería comprensible, si no existieran subvenciones para casi todo, como este no es el caso, en Coleopar Ceparia no comprendemos como se puede hacer este agravio comparativo.
Desilusiona que por ahorrar, siempre hay que ahorrar en este sector, o por darle alguna utilidad a unas instalaciones ideadas para otro tipo de actos, se nos casi esconda en lo que han llamado pomposamente Zona Congresual. En Córdoba, por ejemplo, La Feria del Libro "se esconde" en el Bulevar.
Desilusiona que además la propaganda de la Feria salga en los días próximos a su celebración y con una deficiente difusión.
Desilusiona, aunque esto sea producto de la sociedad consumista en la que estamos inmersos, que una gran cantidad de padres, madres o acompañantes de niños en general, que se amparan en la crisis como excusa para no hacer muchas compras, lo mismo que ocurre en otros sectores, se decidan a adquirirles a sus pequeños acompañentes lo que mas publicidad tiene en los medios, lo que serían, comparándolo con otros sectores, "libros de marca" que como las zapatillas "Tal", la mochila "Cual" o el chandal "Tal Cual" tienen un precio de entre un 400 o un 500 % mas que cualquier otro buen producto no publicitado.
Pues a pesar de todo esto, habemos una serie de personas, libreros y pseudo-editores, sobretodo estos últimos, que como no tenemos remedio, posiblemente al año que viene volvamos a estar ahí, en la Feria del Libro de Palma del Río, dispuestos de nuevo a dedicarle casi una semana de nuestro tiempo a este evento y a poner a prueba de nuevo nuestra salud con los cañonazos de aire frío por parte de la climatización que posee este Centro de Congresos palmeño, que por lo que parece no tiene término medio, o te deja congelado o se apaga, con lo que demostramos nuestro masoquismo y llega uno a una única conclusión "entonces ¿de que me quejo, so jili...?